Como parte de la llamada Operación Martillo, la Guardia Costera de Estados Unidos encontró miles de kilogramos de drogas en las aguas del océano Pacífico. Sin embargo, los marines nunca imaginaron que iban a hallar una tortuga en extinción entre los bultos.
Los tripulantes del barco Thetis, designado en el sector de Key West, divisaron al quelonio, el cual se encontraba enrededado entre las cuerdas de los paquetes de cocaína en una carga ilícita equivalente a 53 millones de dólares, según el estimado de la guardia.
Los protagonistas relataron la historia. Todo sucedió cuando la flota lanzó un pequeño bote para investigar el campo de escombros.
Mark Krebs, comandante de la misión, indicó que cuando su equipo llegó observó a la tortuga marina enredada. Krebs declaró que el animal presentaba "importantes roces por las cuerdas que llevaba en el cuello y las aletas". La tortuga fue rescatada por las autoridades costeras y la liberaron luego de cortar los filamentos que la atrapaban.
Asimismo, la tripulación del barco recuperó más de 75 pies de cuerdas para evitar que otras especies se enredaran con el material.
Durante la misión, se expropiaron seis mil 755 kilogramos de cocaína y 14 libras de marihuana. Además, un total de 24 presuntos contrabandistas fueron arrestados.
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